¿Te ha pasado que estás en un interior con luz fría y te da la sensación de frescura?


Últimamente en diferentes ciudades se han presentado altas temperaturas de calor, donde forzosamente tenemos que estar dentro de un espacio con aire acondicionado o con ventilación artificial para poder refrescarnos.

Dentro de este escenario, todo pinta muy bien. Estamos sin calor en un espacio fresco.

Pero ¿qué pasa con nuestro recibo de luz? Ese aire acondicionado o ventilador, como todos los aparatos electrodomésticos también están conectados y por ende, están generando un consumo eléctrico y esto se termina viendo reflejado en tu recibo de luz.

Aquí te damos algunos tips que puedes tomar en cuenta para estos días en que las altas temperaturas de calor no nos dejan estar tranquilamente:

 

1.- Procura tener colores claros en tu interior
Aquí es donde entra la teoría del color: pinta de colores claros tus muros. Un color blanco además de significar unidad, nos da la pureza de los espacios. Así como una mayor iluminación ya que la luz del sol entra directamente y así, no tenemos que tener encendidas las luces todo el tiempo. También nos da una sensación de frescura dentro del espacio. Por lo que puede ser muy benefactorio para todo ser vivo que esté en el espacio interior.

Además, en tiempos de calor una temperatura de color fría (6500K) nos brinda la sensación de mayor frescura.

 

 

2.- Apaga las luces que no estés utilizando o desconecta aparatos sin usar
Aún cuando sean focos LED, si sales de una habitación procura apagar la luz. Así ahorrarás en tu recibo de luz.

Del mismo modo, los aparatos que no estés usando en ese momento, ¡desconéctalos! Verás que te traerá muchas más ventajas que dejarlos conectados en todo momento, por ejemplo: un horno, la licuadora, el tostador, cargadores de celular o computadora, entre otros.

 

 

3.- Cámbiate a focos LED
Qué mejor para este calor que no tener calor, ¿no?

Probablemente en tu casa o negocio tengas focos, si son incandescentes muy seguramente te generan un consumo de luz tremendo y si te acercas un poco a tus focos, puedes sentir el calor que emiten. Por lo tanto, no son amigables ni con el ambiente ni con tu bolsillo.

En cuanto a los famosos focos fluorescentes o “ahorradores” como se estuvo diciendo mucho tiempo. También emiten cierto calor y calentamiento que puede provocar quemaduras.

Sin embargo, los focos LED cuentan con componentes reciclables, el poco calor que llegan a emitir es disipado por el mismo foco.

 

 

Además, la enorme ventaja es que no solamente puedes cambiar por focos LED, sino también por productos que tengan el LED integrado, que dependiendo el uso que le des y su correcta instalación, te pueden durar hasta 10 años.

Contamos con unos focos LED que pueden ser de gran ayuda para este calor, ahorro en recibo de luz y también para tu bolsillo.

 

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